Contenido

Otros mundos

Contenido

El positivismo es una escuela de pensamiento que propone que todo conocimiento genuino debe basarse en hallazgos reales, es decir, verificables por nuestros sentidos.

El método científico actual es positivista. Todo conocimiento científico debe basarse en hechos reales, verificables por nuestros sentidos.

A veces optamos por una opción extrema como defensa ante otra opción extrema. Si una comunidad científica es frecuentemente amenazada por las comunidades religiosas, con dogmas que conducen a bloqueos, quizás sea natural conducir la lucha a un terreno donde se tenga ventaja. Pienso que es la razón por la que la ciencia se ató con fuerza al positivismo.

Sin embargo, sí existen más cosas que las que podemos verificar con nuestros sentidos.

Como guía en este mundo físico, la ciencia usa un modelo físico matemático que se corresponde. De modo que podemos ver reflejadas en ecuaciones las explicaciones de los fenómenos que observamos, y hacer predicciones de lo que podría ocurrir.

Por ejemplo, el modelo físico matemático dice que existen frecuencias que no podemos percibir, pero que actúan sobre la materia, y usamos este conocimiento en fotografía y telecomunicaciones.

También tenemos un modelo biológico para explicar el funcionamiento de los cuerpos vivos.

En campos como la historia o la economía, aunque los hechos no se puedan verificar por nuestros sentidos, porque ya pasaron o porque ocurren a nivel de multitudes, se usa el método científico sobre los registros que esos hechos producen. Huellas, fósiles, ruinas, escritos, estadísticas.

Por simplificación, es fácil decir que la ciencia explica lo que existe y de ahí saltar a decir que si no se puede explicar por la ciencia, entonces no existe. Pero no es correcto.

La ciencia explica lo que existe… en el contexto determinado por lo que podemos verificar con nuestros sentidos (directamente o mediante algún dispositivo auxiliar) y comprender con nuestro modelo físico matemático.

Lo que esté más allá de ese contexto queda fuera del alcance de la ciencia positivista.

Y ese más allá sería el universo de las cosas que podemos verificar con nuestros sentidos pero no comprender con el modelo físico matemático. O las cosas que el modelo físico matemático propone pero no podemos verificar con nuestros sentidos. O las cosas que están más allá del alcance de nuestros sentidos o nuestro modelo.

Por eso, es un error decir a secas que si la ciencia no lo puede explicar entonces no existe.

Sí hay cosas que percibimos pero la ciencia no puede explicar porque está más allá de su modelo físico matemático.

Y algunas son muy cotidianas.

Por ejemplo, si escribes en un papel “El árbol es verde”, una cosa son las manchas de tinta que hemos dibujado y otra el mensaje.

Podemos hacer una copia de esas manchas debajo, y nuestros sentidos y mediciones mostrarnos que son objetivamente distintas de las primeras. Pero el mensaje es el mismo.

¿En dónde existe el mensaje? Existe en una dimensión mental. Más allá del modelo físico matemático. Sin peso, sin materia, pero ahí está.

Reflexionar sobre lo que es un mensaje puede ser una tarea muy profunda.

Si en lugar de escribirlo yo, lo escribiera otra persona, con otra letra, o incluso la imprimiera con una máquina, la escribiera en piedra o la proyectara sobre una pantalla, el mensaje sería el mismo.

Pero si lo mirara alguien que no conoce español, no habría mensaje. O quizás sería otro.

Así que el mensaje depende de quien lo lee.

¿Y no es todo el universo como un enorme mensaje que hemos formado en nuestra mente con los estímulos que hemos recibido con nuestros sentidos?

Si escribo con tinta roja en un papel blanco “Esta es la salida” y me coloco unas gafas rojas, no podré distinguir las manchas y ya no habrá mensaje, aunque sé que existe la frase escrita capaz de ayudar a formarlo.

En un mundo de portadores de gafas de colores, cuántas cosas sabrías que existen y que los demás no pueden distinguir.

En un mundo de ciegos, cuántas posibilidades que no pueden ni imaginar.

¿Qué estamos dejando de conocer al limitar nuestro conocimiento al plano físico?

El modelo físico matemático no existe en el plano físico. El método científico no existe en el plano físico. La escuela positivista no existe en el plano físico. Son estructuras mentales que nos han servido para explorar y explotar el mundo físico, con la condición de ignorar todos los demás.

Parece como un encantamiento.

Quizás sea que hemos ido tras el hueso, su aroma, y gozado de su sabor, en este rincón del jardín, para que no molestemos.

Si tomo un palo y te amenazo, sientes miedo. Quizás la tinta sea la cortisona y el papel tu fisiología, pero el miedo es el mensaje que se forma dentro de tí. Es un plano emocional.

Al menos están estos dos planos, emocional y mental, para mostrarnos que hay algo más allá de la ciencia.

Crédito por la imágen original